Es un tremendo sacerdote payador de parroquia Nuestra Sra de Andacollo del Cerro Ramaditas en Valparaiso. Lo estima y quiere gran parte del puerto. Y todo el cerro. Es un gran ser humano. Comunicador. Apaciguador del dolor y la esperanza. Contagia optimismo y alegria cada dia. Mucha gente a sido bendecida con su amistad sin importarle color politico raza. Condicion sexual. Estrato economico. En mi caso acepto mi condicion de transexual. Yo confio en su merecimiento con creces. Hay todo un cerro Ramaditas que lo ama y tambien de otras partes de Chile en mi caso desde Coquimbo.